Angkor II

Apenas dos dias en Phnom Penh me quedan, apenas dos dias en Cambodia con la extrania sensacion de que aunque es muy complicado que vuelva, todo es posible en esta vida, esta segunda visita no la esperaba y me ha regalado otra experencia unica. Unica como la visita a Angkor, era mi segunda vez pero la primera que los visitaria acompaniado, sabiendo por tanto donde y cuando ir.

Los templos de Angkor los puedes visitar como un turista mas o visitarlos con el alma abierta, pero para eso necesitas visitar cada templo a su hora apropiada. Estuvimos una tarde, un dia entero y una maniana viendolo y como no, los mejores momentos, los mas magicos, siempre te los brinda el amanecer y el ocaso. El dia entero nos recorrimos el circuito grande (en bici, 40 km) pero lo mas grande, lo mas magico, lo especial lo encontramos en los dos amaneceres.

Empezamos por el mitico Angkor Wat como primera toma de contacto. A eso de las 3 de la tarde entrabamos. Deambulamos por el templo sin mucha prisa, ellas admirando su primer templo de la era Angkor y yo flipando de como el numero de turistas japoneses habia subido hasta llegar casi al 90%, pero tambien encantado de volver a ver los templos y volviendo a confirmar que la vida gira y gira sin parar. Alli estaba yo otra vez, esta vez con dos amigas que no pararon de reir para mi regocijo. Esta vez no me escondia de los turistas, esta vez NOS escondiamos.


Aqui estan las locas, que se lo pasaron en grande fuera del taller.


Antes del atardecer nos fuimos al templo de Ta Prohm, sin duda mi favorito. Queria verlo a ultima hora del dia cuando los turistas se afanan por ver la caida del sol en un solo punto, el mas frecuentado, una montania que hay por ahi perdida. Libre de turistas entramos en Ta Prohm. La pena fue que cerraban el templo pronto asi que no pudimos verlo todo el tiempo que quisimos, aun asi, se creo un silecio entre nosotros a medida que ibamos recorriendo los pasillos.


Las caras de ellas reflejaban el alucinamiento puro. Recuerdo sobretodo que la gitana se quedo parada en la puerta de entrada al recinto, anonadada, y tuve que pegarla un berrido para que acelerara, que iban a cerrar.

El primer amanecer lo pasamos en Bayon, otro templo muy especial. Estuvimos cerca de una hora dentro sin ningun turista, sentados en lo mas alto del templo observando como las caras iban cogiendo nitidez, como cambiaban los gestos a medida que los rayos del sol les alcanzaban. Silencios magicos, perdidos cada uno por un rincon, sentados en piedras centenarias imaginando el esplendor del reino Angkor y no dejando de sacar fotos. Era de esos momentos que todo te parece especial, que desearias guardar en la retina todos los matices y figuras.


Momento en familia, segundos despues nos fragmentamos. Normalmente no te dejan ni apollarte en las piedras que estan ellas pero claro, a las 7 am ... como que no habia nadie que vigilase (fui yo el que tuvo que poner civismo a la visita, !quien me lo iba a decir!)

A la salida del Bayon y despues de un suculento desayuno (y siesta de una hora en un mini templo) proseguimos nuestra etapa de 40 km.


Aqui estamos en la terraza de los elefantes, recien recuperados del madrugon y del sock de Bayon.

Despues de ver unos templos mas y con las energias y la sensibilidad algo cansadas decidimos ir a Angkor Wat una vez mas pero esta vez para sentarnos y ver el atardecer. Y tal como llegamos con unas birrillas, cogimos sitio en un lugar totalmente vacio de turistas y dejamos pasar los minutos.





Y Ta Prohm. El templo con mas magia de los que he visto en Angkor y no solo para mi, para la gitana y la novia cadaver igual. Ese dia, el ultimo, pegamos un madrugon y cogimos un tuk-tuk para llegar a tiempo de ver las sombras, y asi fue. Desde que entras por la puerta de la muralla hasta llegar a la puerta del recinto interior tienes que andar unos 100 metros en linea recta. De dia desde la muralla se ver la puerta del recinto, pero a esas horas de la madrugada no se veia una carajo. Serian las 5:45 cuando entrabamos.
Ta Prohm fue un recinto que hacia las veces de templo y hospital. En el trabajaban cerca de 80.000 personas y contaba por ejemplo con 615 bailarines. Era el hospital central el reino de Angkor y desde ahi se gestionaba el resto de los centros de salud del reinado. Su principal caracteristica es que es el unico templo que se dejo abandonado a los elementos y desde hace cerca de 800 anios las plantas y arboles crecen a su antojo por todos los rincones. Sin duda es el unico templo que se conserva tal como los primeros europeos los descubrieron, alla por el anio 1920. Es magico, sublime y muy especial, si a todo esto le sumas el visitarlo al amanecer obtienes un resultado unico, sencillamente indescriptible.
Recuerdo el susto que me lleve al ver la puerta de entrada del recinto. Apenas se veia a 10 metros, ibamos andando en silencio. De repente ves que el camino de tierra que ibas atravesando de una anchura de unos 3 metros se convierte en un pasillo de inmensas piedras de silleria que conduce a una puerta de piedra. En donde empieza la primera piedra hay un arbol inmenso, gigantesco, cuyas raices han provocado que las piedras de silleria esten alborotadas, medio montadas entre ellas con las raices sobresaliendo por los huecos, como si un terremoto hubiera sacudido la tierra.
Stop. Todos quietos, silencio, todos flipando. Seguimos hacia adelante y en vez de elegir el perimetro exterior por donde empezaba a clarear el dia nos introdujimos directamente en el corazon del recinto.

NO COMMENT.







Totalmente impresionados nos volvimos para coger el autobus vuelta a Phnom Penh con la satisfacion de haber presenciado algo unico y las pilas cargadas de energia.

Ya hace de eso cerca de 10 dias. En la habiacion tengo bolsas y bolsas llenas de tonterias que he comprado impulsivamente en estos dias, todo lo que no he comprado en 7 meses de viaje lo he comprado en siete dias. A tomar por culo el presupuesto de mochilero, asi ademas me quito esos euros de mas (no muchos) que me harian plantearme un viaje relampago a otro pais, lo justo para el billete (o eso espero que todavia no lo tengo) y para la vuelta a Espania.
Dias de sentimientos, dias de despedidas. En la escuela donde cada dia he ido queriendo mas a los ninios hasta el punto que he tenido que llevar una politica de desenamoramiento (tanto de ellos hacia mi como de mi hacia ellos) y en la guesthouse, en donde incluso nos habian invitado a la boda de un familiar suyo justo este domingo, el dia despues de nuestra marcha, me he encariniado de gente. Toca decir adios, no hasta luego, porque esta vez me queda el viaje mas dificil de todos, aquel en donde no podre hacer la mochila y buscar otro pueblo, me queda el viaje de la vida en la vida real, el viaje de encontrar mi locura porque como he leido hoy en la pagina de Carlos, el vagamundos, el mundo esta lleno de locos, esta lleno de viajeros.

Ciao chicos, aqui cierro el penultimo capitulo de esta era, la ERA I. En Bangkok, cuando me quede solo, tal como empece, estare unos pocos dias (pocos mama, tranqui que volver vuelvo) reflexionando sobre el viaje y escribire un ultimo capitulo.

Besos a todos.